Too hard to understand

A veces lo más fácil resulta lo más difícil, a veces lo sobrestimado es lo más complicado. Y es que hoy a la ligera inspección de mi gato, como si supiera que algo anda mal en mí, me he rendido ante la entrada de este blog. 

Ya estoy cansada que las búsquedas en la red exploten con respuestas, que los casos sigan y sigan fluyendo, que entre expertos, empíricos y patanes den posibles soluciones a un asunto que ha conquistado completamente los espacios de mi mente. Y aunque la mejor prueba de que no soy la única que padezco de esto esté en la anterior oración, el terror de un futuro amenaza mi estabilidad.

Es que los sentimientos fluyen como siempre, y creer que eso puede ser la causa de un final me expone y me doblega al punto de desahogarme en este blog. Es que montas un mundo perfecto... ¡Es que como siempre monto un mundo perfecto! Y ver que algo tan importante persiste, lleva todo mi escenario abajo. Y me desespero por saber qué pasa por su mente; qué pronóstico le da a este andar. Si para esa persona esto se derrumba, no lo ha notado o simplemente le da más seguridad.

Y aunque las cosas no caigan ante mí, la culpabilidad me ha rodeado mil veces hasta formar un idea consistente. Y a pesar que estoy segura que si hago una lista de cosas positivas y negativas, las primeras saldrían airosas; me sigo preguntando si él redactaría esta lista de otra manera.

Ya los peores pensamientos han pasado por mi mente y en esas ocasiones, como ahora, me desespero... Sea cual sea el pronóstico sé que aprenderé mucho, incluso si implica un aprendizaje largo y doloroso. Y ahora a aplicar los primeros recursos y técnicas, si mi vida y el destino coinciden conmigo; que como todos, a todo le tengo miedo, pero no soy cobarde.




Comentarios

Entradas populares